Los argumentos esgrimidos por los fumadores para oponerse rotundamente a esta prohibición son desde que se coarta su libertad para decidir, la conversión en un estado policial, las pérdidas en sectores como la hostelería, que por qué no lo prohíben del todo si tan malo es o acusar al Estado de actitudes hipócritas al cobrar impuestos por él, argumentos que, cualquier dato empírico al respecto, pueden rebatirlos sin excesivo esfuerzo.
El humo del tabaco interviene directamente en la génesis del cáncer de pulmón, humo que no sólo inhala el que fuma sino el que respira pasivamente lo que otros fuman. Además, contiene 43 sustancias perjudiciales como el benzopireno y la nicotina, que influye directamente en la proliferación de esta grave enfermedad.
Esto plantea varias cuestiones ¿ Ha de prevalecer el derecho del fumador sobre el del fumador pasivo? ¿ Nuestros derechos no tienen como límite los derechos de los demás?. Los fumadores reivindican la libertad para decidir, una capacidad que, indubitablemente, se asocia a un derecho, pero ¿ acaso el ejercicio de este derecho no vulnera el derecho de otros a que no se perjudique su salud?. ¿ El derecho de respeto a la salud de los no fumadores no es suficiente para considerarlo un derecho general y priorizarlo sobre el particular?.
Respecto a posturas sobre la total prohibición del tabaco, ¿no implicaría esto, una absoluta injerencia en la libertad del individuo que ya es advertido- y de todos son conocidos- sobre los efectos perniciosos del tabaco en la salud, quien ejerciendo tal libertad, decide o no consumirlo?. ¿ Debe el papá Estado actuar de tal manera que prohíba el consumo de todas aquellas sustancias que son perjudiciales para la salud? ¿Dónde terminaría la protección para convertirse en represión?. Es bien cierto que se protege al débil que, sin prestar su consentimiento, se ve afectado por la hasta ahora no prohibición de fumar en cualquier sitio y en cualquier circunstancia, sin tener en cuenta al fumador- trabajador pasivo.
Con esta ley no se prohíbe fumar, sino, simplemente, ha acotado lugares de concurrencia donde puede haber no fumadores – y trabajadores- que no tienen por qué tolerar sustancias perjudiciales para su salud. Es, por tanto, un límite físico a lo que ya debiera ser un límite moral, el daño a la integridad física del no fumador. Que existan máquinas expendedoras donde se venda tabaco pero se prohíba fumar no debiera considerarse, según mi criterio, una actitud hipócrita ( repito, no se prohíbe fumar, se legisla dónde no se puede fumar). Podríamos compararlo con las máquinas expendedoras donde se venden profilácticos, y no por ello, pueden ser usados en el sitio de venta.
El no fumar no implica invadir la parcela de los derechos del que fuma, y menos afectar a su salud, la inacción no supone un perjuicio que sí la genera la acción de fumar. Durante años se ha soportado el derecho del fumador con resignación estoica, o por elección, no poder tomar un refresco con menores en cafeterías o restaurantes, con un argumento más que suficiente que es la salud de los que allí se congregan.
Actitudes o comentarios como el del bocazas nacional, León de la Riva (“Así empezaron cosas terribles en la historia de la humanidad; primero buscaban a los judíos, aquí denunciamos a los fumadores”,) o el ilustre académico de la Lengua ( y a veces, se va de la idem) Pérez Reverte ("Anna Frank fumaba. La delató un vecino a la Gestapo cuando bajó a fumar al bar".) no hacen más que caldear el ambiente de los que se declaran insumisos a una ley consensuada y aprobada por, prácticamente, la totalidad del Congreso.
Tampoco es de recibo el “ chantaje” de algunas hosteleros de la comunidad valenciana que se atreven a desafiar el cumplimiento de una ley argumentando que, o se deja fumar en su establecimiento, o despiden a un empleado.
Sólo un dato debiera ser suficiente para su cumplimiento ( no sólo porque es ley y nos obliga) y, por un momento, hacer reflexionar estas actitudes egoístas ( MI DERECHO, MI ELECCIÓN): cada año mueren 60.000 personas como consecuencia directa del consumo del tabaco, unas 1500 fumadores pasivos. ¿ Cuándo, éstos últimos, tuvieron elección?.
EVA MARTÍNEZ ACÓN.
24 comentarios:
Yo soy fumador, y estoy totalmente de acuerdo con la ley, es mejor fumar al aire libre y desde luego mucho más no hacerlo en locales cerrados.
Hace mucho tiempo, antes de entrar en vigor la primera ley, yo dejé de fumar en mi casa y en la de los demás, incluso cuando otros fumaban yo me salía al exterior para hacerlo, es cuestión de educación.
El tabaco es algo que está ahí desde hace mucho tiempo, formó parte de una cultura, prohibirlo no estoy de acuerdo, sería dar el paso a crear nuevos cárteles de otra droga y al enriquecimiento ilícito de unos pocos a costa de muchos, pero ya se sabe intereses oscuros los hay en muchos sitios.
Totalmente de acuerdo con Eva.En mi opinión es el mayor avance social que ha conseguido este gobierno. Estoy absolutamente emocionado y empiezo a creer en las virtudes del Boletín Oficial del Estado.
Estoy de acuerdo con el fondo y la forma del artículo Eva.
Cuando el Gobierno de Zapatero sabe que tiene razón suele apretar el acelerador hasta tocar con la suela del pie el suelo del coche, y en ocasiones le falta capacidad de graduar las reformas y el como se presentan a la ciudadanía.
En este caso el Gobierno a todas luces tenía y tiene razón en su postura (hay un consenso general), sin embargo las formas de tramitar la Ley, y seguramente algún punto del articulado podría haber sido más abierto a otras posturas cercanas. El cabreo del pequeño empresario de hostelería podría haber sido tenido en cuenta, y existen varias razones para ello. Una importante es generar un buen clima con la CEPYME como suelo para futuras negociaciones en otras áreas.
Por otro lado están los fumadores. Rechazadas las demagogias y las reducciones al absurdo, el mandar a mucha gente (supongo que muchos en el paro) a fumar a la puerta del Bar en invierno puede provocar un estancamiento de la sensación general de cabreo, para el cual ya confluyen varias causas y estas se acumulan con el tiempo.
En muchas ocasiones falta un mayor grado de inteligencia emocional, de gestión de las emociones ajenas, por parte de los gobernantes. La mejor arma contra el cabreo general es la labor explicativa, y explicar que los fundamentos de la reforma son absolutamente lógicos es algo que no siempre se sabe hacer bien.
La adaptación de los avances razonables en el bien colectivo al impacto emocional que producen es una praxis de gobierno muy saludable.
En cualquier caso, con esta Ley ha pasado tres cuartas partes de lo mismo que sucedió con la prohibición de los Toros en Cataluña; los abolicionistas ganaron la batalla paulatinamente dejando hablar a quienes defendían tanto el fumar en zonas públicas como la Tauromaquia.
Específicamente aquellos que se han dejado llevar por los nervios y han caído en algunas reflexiones poco afortunadas.
El cúmulo de posiciones extremistas, reducciones al absurdo y comparaciones desafortunadas (comparando un Gobierno democrático con el antiguo régimen Nazi) ha adquirido proporciones cósmicas, y le han hecho al Gobierno el enorme favor de no tener que explicarse demasiado.
El alcance en la salud pública de está ley se verá. No des por hecho que la reducción de costes sanitarios en enfermedades pulmonares vaya a ser espectacular. Respiramos, por desgracia, mucha porquería que no proviene del tabaco del vecino.
Pero una cosa que está clara es que antes había locales donde ya estaba prohibido fumar. ¿Por qué no proliferaron, se forraron, etc.? ¿Atiende con esta ley el político a una verdadera demanda social?
Mi impresión es que esta reforma socio-sanitaria nos viene importada del mas puro puritanismo europeo (donde la mayoría no son precisamente católicos no practicantes como nosotros). En España, con mayúsculas, NOS DIVERTÍAMOS, joder. Por eso venían de todo el mundo a echarse las juergas aquí. Y lo próximo, ¿que va a ser? ¿Las copas a 25 euros? ¿Las fiestas en casa? Date una vuelta por una ciudad centroeuropea a las 7 de la tarde, Eva, verás que cementerio.
Y a cuento de la salud pública, a prohibir, que es una historia muy vieja ya. Y polémica, claro.
Por eso, dado el carácter de este blog, lo que hay que discutir es su oportunidad política.
Mi opinión es que no había demanda social en este momento. Y menos su aplicación en modo hachazo, sin tiempos intermedios ni medidas temporales. Me hace pensar que es una simple cortina de humo para distraer, como afirma el PP.
Creo que esta ley se pasa en algunos aspectos. Comparto algunos de los argumentos que expones, Eva, pero insisto en que se ha cometido un exceso en algunos puntos.
¿No fumar en un parque infantil? Sin embargo en ese mismo parque se puede mon ...tar un botellón con menores de edad y nadie dice nada.
¿Por qué no bares y restaurantes para fumadores? Por miedo a que la gente elija y al final se pueda fumar en todas partes.
¿No te parece a tí una exageración que a las 2 de la mañana no se pueda fumar en un pub? El argumento de que el que trabaja ahí tiene derecho a no fumar humo me parece débil, se soluciona contratando fumadores o que el no fumador no solicite un trabajo en sitios donde se fuma. Por que aquí parece que el derecho del trabajador no fumador es absoluto, si él no fuma, nadie puede fumar, aunque sea un sitio donde en principio podría ser razonable que se fume, insisto un pub a las 2 de la mañana.
El resto de las prohibiciones son medianamente razonables, creo yo.
Un último inciso sobre la técnica legislativa. Un horror, si lees la ley verás que DEBEMOS fumar allí donde no está prohibido.
MARCELO
Es una Ley que bien vale una legislatura, precisamente porque del resto de la misma mejor no hablar; el principal y único activo de la ministra Pajín, política de lo más prescindible, a la que en este caso tengo que agradecer que saliese adelante esta Ley antes de que nos desalojen a bofetadas de la Moncloa. Será otra de esas leyes progresistas que luego la derecha no se atreverá a cambiar y por ello es altamente positiva. Resulta gracioso que los tea - parties bramen contra ella y digan que puestos lo mejor era prohibir fumar, ellos que tanto abogan por los derechos individuales. Esta Ley permite fumar al que quiera y permite no tragar humo al resto, de manera que en mi opinión es un completo acierto. En cuanto a lo de cortina de humo, pues hombre algo de eso también hay, pero es que con la que cae no creo que sirva de mucho. La crisis nos va a echar del gobierno en parte porque es así la vida y en parte porque hemos cometido errores y esos en política hay que pagarlos.
Este ley es el globo sonda, el testeo, la muestra de lo que se viene. La pulsión totalitaria de la izquierda asoma con las dos nuevas iniciativas el Consejo Estatal de Medios Audiovisuales, para coartar la libertad de prensa y la de Ley de Igualdad de Trato para multarnos a todos cada vez que levantemos la voz para quejarnos de lo mal que van las cosas.
A todo esto, es importante recordar cual es la verdadera postura del Partido Popular en este tema.
http://www.publico.es/espana/356780/rajoy-no-sabe-lo-que-vota
Recomiendo leer todo el artículo y prestar especial atención al antepenúltimo párrafo.
Como podemos observar el Pp también forma parte del totalitarismo izquierdista.
Creo que Rajoy va camino de ser Pol Pot, como mínimo.
Miguel: Los del PP en este asunto se han portado igual que el PSOE, dándonos la razón a los que sostenemos que entre unos y otros pocas diferencias hay. Basta leer sus programas electorales, idénticos en más del 80%, coincidentes en casi todo.
Tengo para mi que sólo se diferencian en que unos son un poco, solo un poco menos corruptos que los otros.
Marcelo:
Efectivamente el PSOE comete un error de manual al creer que debe asumir gran parte del discurso conservador para evitar el previsible batacazo electoral.
En ese sentido el señor Zapatero está muy mal asesorado, porque según todas las estadísticas electorales y todas las Elecciones desde hace más de 20 años (una vez desaparecido la UCD y la transformación de AP en PP) dan como conclusión nítida que mientras que la orquilla electoral del PP es más o menos estable, la del PSOE tiene la anchura del Cañón del colorado.
Una de las principales razones es que el PSOE tiene una bolsa de abstención propia, la cual se dedica a perderla y recuperarla cada cierto periodo de tiempo.
No existe un gran trasvase de votos entre la derecha y la izquierda, y efectivamente el PSOE hace mal intentando competir por un voto que nunca ha sido suyo.
Es por eso por lo que el PSOE no debería dedicarse a contentar a la derecha (tampoco a la sociológica) tomándose ni siquiera medianamente en serio determinadas demagogias que nadie con dos dedos de frente puede asumir.
Por otro lado, si el PP ahora hipócritamente quiere mentirle a los españoles (una vez más) haciendo como que no recuerda lo que vota o deja de votar, es exclusivamente responsabilidad del PP, no de los demás. Yo creo en aquello de que cada palo aguante su vela.
En cualquier caso, si el PP dice que 2+2 es igual a 4, acto seguido no es muy racional afirmar que 2+2 es igual a 5 con tal de diferenciarse.
No se trata de si uno se diferencia o no se diferencia de la derecha, si no de tener criterio propio, y el tener criterio propio, sazonado con una pizca de sentido común, es algo muy positivo.
Las imposiciones, como se explica sobradamente en la teoría política moderna, no solo provienen del Estado, sino también de agentes privados (ya sean personas físicas o jurídicas), y el ciudadano debe ser protegido de todas.
Si existe un derecho fundamental que los ciudadanos como individuos puedan reclamar es el derecho a la salud. Cuando los constituyentes y los legisladores (hombres y mujeres más o menos duchos en derecho) suelen fijar (no nos vamos a poner aquí a hablar del "derecho natural") los derechos fundamentales, uno muy habitual es el derecho a la salud o la salud pública como principio rector de las políticas del Estado.
(...)
(...)
Quiero recordar aquí cierto choteo sobre algunos derechos de nueva generación, a colación de la aprobación del Estatuto de Autonomía de Cataluña. Recuerdo por ejemplo el debate sobre el "derecho al paisaje", que tenía que ver con la organización urbanística y la limitación de las alturas de los edificios en las ciudades para lograr un desarrollo urbanístico organizado, y que a uno no le planten un bloque de nueve pisos delante de una manzana de edificios de 5 plantas tapando toda la vista.
Es evidente que no se puede cuestionar con un mínimo de seriedad esta serie de cosas y acto seguido hablar del "derecho a fumar", que basicamente es como hablar del "derecho a beber Tequila". No se pone en cuestión del "derecho a fumar", derecho que por otra parte no existe porque no es lógico que existan derechos sobre pautas tan concretas de comportamiento (los derechos son más genéricos y es aquí cuando ganan sentido), si no que se cuestiona el derecho a "hacer respirar humo a los demás", prohibición que efectivamente se puede extender a instalaciones que sean propiedad privada porque en instalaciones privadas también rigen las Leyes, cosa que seguramente ya sabes.
Evidentemente las instalaciones privadas no son "islas antijurídicas", como si los Bares intentaran emular las prisiones ilegales de la CIA en Polonia.
Las cosas, cuando se defienden, tienen que tener un mínimo de sentido, tener lógica y ser medianamente racionales.
Que sean de izquierdas o de derechas es algo, en ese sentido, secundario, aunque no poco importante.
Estoy seguro de que la reforma de la Ley anti-tabaco podría ser más habilmente explicada y gestionada con mayor voluntad de tender puentes a la hora de tramitarla en el Parlamento, pero de ahí a aceptar determinadas barbaridades hay una distancia. Todo tiene que tener una cierta lógica.
En cuanto a quienes son más corruptos y quienes menos, no estoy en disposición de hacer una afirmación categórica en ese terreno porque no tengo estadísticas al respecto.
Lo que sí me gustaría es que en la cultura política en España se incluyera la costumbre de barrer a toda la basura que pulula por los partidos, que no cree en absolutamente nada y que se dedica a intentar forrarse lo antes posible.
Esto no incluye el alegrarse por el Estado de Derecho porque un señor inmerso en varios casos de corrupción se libre porque los delitos de los cuales se le acusaba han prescrito.
Si vivieramos en un Estado fallido como Somalia, uno no se sorprendería, pero viviendo en la octava potencia mundial, es como para preguntarse que demontres hacemos para merecernos a individuos/as así dirigiendo nuestros destinos.
Un cordial saludo Marcelo.
A Miguel y otros más
Uno puede montar mil debates con expertos y con profesionales de la medicina, retransmitirlos por las cadenas de televisión y procurar que los periódicos dediquen separatas y especiales sobre el tabaco y las leyes, pero, básicamente, las posturas no cambiarían mucho.
Como fumador, y por respeto a los demás ciudadanos, no me importa salir a la calle a fumar. Mis malos humos mejor que me los coma yo solito. La democracia es también respeto al otro.
El argumento de que el aire está contaminado por otros efluvios, tubos de escape de los coches, polución por fábricas, no deja de ser muy malo, pues sí, además de los humos del tabaco acotemos a los otros humos, pero, de momento, ahora toca tabaco y exijamos otras leyes anticontaminantes.
La reacción de los hosteleros siempre estará entre el esperpento y lo cómico, el caso es quejarse. Ya la anterior ley, un poco light, no les gustó, y ahora ésta, les gusta menos.
Otro de los argumentos, malos también, es el de la cortina de humo o las maniobras de distracción. El argumento en su circularidad absurda sería éste: mientras usted no resuelva la crisis no legisle sobre otros temas, es decir, arregle la crisis, primero y después hablaremos de otros temas. Pero la vida sigue, y no todo es crisis y además poco se puede hacer, o puede hacer un gobierno, sea portugués o español o italiano, ante la señora Merkel y sus diktas. Hay mucha demagogia en los que se salen por la tangente y pescan o intentan pescar en río revuelto.
Menos humos y más conciencia social.
España era tan grande, Joseantonio7, que hasta nos divertíamos los no fumadores viendo fumar a los fumadores.
Una montaña rusa de emociones, un descojone continuo, el concepto de diversión elevado al cubo... divertirse sin tabaco en los bares va a ser un imposible en la nueva España.
Esto es el acabose.
Yo creo que volveremos a la heroína, como en los setenta, para volver a divertirnos un poco. Además, ahora como se fuma pues no enguarra tanto.
Marcelo, lo de pulsión totalitaria simplemente por una ley de la que disponen en otras partes de Europa me parece un tanto descentrado.
Como lo del ayudante de Derecho Constitucional al que querías poner de ascensorista o chico de los recados(sic).
Y si nos dejamos de tanta imbecilidad y acatamos una ley aprobada en el parlamento español.
A veces me da vergüenza ser española por los mismos descerebrados de siempre que se indignan porque una ley limita un vicio y no por temas trascendentales.
Mira mi ombligo, que bonito es!!!
Que gente.....
buen artículo Eva.:)
Enhorabuena Eva, has dicho lo que hay que decir y dejas poco espacio para la crítica. A mí el tema me parece ya antiguo, era una ley obvia que hace tiempo que tenía que haberse aprobado (la fase intermedia fue un error) y el debate está tan superado en todos los países civilizados que es mejor tomar las críticas patrias como un pataleo de temporada; en un mes el tema es historia.
Pataleo, imbecilidad, descerebrados, volver a la heroina, hosteleros esperpenticos y cómicos, tea-parties, demagogia, ...
Joder con los adjetivos, niños. Pediros perdón por haber opinado y nada más. Ya veo que estais muy a gusto dandoos la razón unos a otros. Ha sido un error intervenir. Adios.
Joseantonio7, hay que curtir más esa mandíbula de cristal, que todavía es esta la fase de las caricias y los arrumacos y ya te quedas sin aliento.
Si por llevarte la contraria en un debate del todo inofensivo te pones así, madre mía...
Joseantonio7, hay que curtir más esa mandíbula de cristal, que todavía es esta la fase de las caricias y los arrumacos y ya te quedas sin aliento.
Si por llevarte la contraria en un debate del todo inofensivo te pones así, madre mía...
Cambiando un poco de tercio, felicitar a quien corresponda por esto:
http://www.lavozdegalicia.es/coruna/2011/01/18/0003_201101H18C4991.htm
Cuando las cosas se hacen bien, se acaba notando, y además es justo reconocerlo.
Un saludo.
Como en algunos navegadores creo que recorta la URL que colgué hace unos instantes en un comentario, solo aclarar que esa URL lleva a la noticia de la elección de Pepe Buitrón, ex-Gerente del CHUAC, para su inclusión en una lista electoral en las Elecciones municipales.
Estoy con Sirenita y RAS, las leyes que benefician a la mayoría son buenas leyes. Como miembro de la minoría fumadora tengo que decir que el tener que salir fuera de los establecimientos tiene muchas y variadas ventajas:
1.- Se estiran las piernas
2.- Se activa la comunicación con extraños
3.-Se puede ligar más, pues en la calle la música suena más baja.
4.-Se puede hablar más tranquilo por el móvil.
5.-Puedes conectarte a Internet desde tu blackberry de forma más cómoda
6.-Puedes enviarle un saludo a tu vecino o vecina que aesa horas no puede dormir
7.-Puedes iniciar una tabla de ejerccios que conjugue pilates con yoga (sólo para veteranos)
8.-Puede que tus amigos, siempre tan generosos, paguen la ronda, aprovechando que no estás dentro del local (de este punto todavía no hay constancia empírica).
En fin, yo creo que sólo hay ventajas. Gracias Pajín.
Pues yo no fumo, pero por todos mis amigos fumadores, y por todas las mujeres que fuman, ¡estoy absolutamente en desacuerdo con la ley¡
Es que me parece el colmo ¡no poder fumar en los bares¡ Tener que salir a la puerta, es de locos¡¡¡¡
Rajoy tiene olvidos
http://www.escolar.net/MT/archives/2011/01/la-desmemoria-la-pereza-o-la-mentira.html
Retiro la palabra "imbecilidad" de mi anterior post. Lamento haber herido sensiblidades o que alguien se 0haya enfadado por el uso de esa palabra que admito, fue mal empleada, cada uno opina lo que estima conveniente aunque me cueste digerir algunas opiniones.
Mantengo la de descerebrados porque me refiero a los "insumisos" a la ley del tabaco, porque, inevitablemente... no me merecen otra consideración.
Publicar un comentario