Ser de derechas, de siempre ha permitido tener el doble de lo que por lo general tienen el común de los ciudadanos; suelen tener el doble de dinero, ligar el doble (el dinero suele ayudar), viajar el doble, mantener cómodamente (si así lo deciden) el doble de hijos, y sobre todo y siendo más prosaicos, hasta tienen el doble de moral, por eso la iglesia siempre les apoya. Y eso de tener dos morales siempre tiene su aquél: te permite aplicarte a ti una y a los demás la otra.
Si atendemos a Pío García Escudero el otro día en TVE: "respecto al caso Gürtel aquel que haya sido imputado por la justicia tendrá una suspensión de militancia inmediata", así se había actuado en fechas previas con los militantes madrileños imputados. El problema que se le presentó al portavoz popular en la cámara alta por piar a destiempo fue que pocas horas después el TSJ valenciano acordó tomar declaración en calidad de imputado a don Francisco Camps y a don Ricardo Costa, Presidente de la CA valenciana y Secretario Regional popular valenciano respectivamente. De suspenderles de militancia por supuesto ni pío.
Si atendemos a Pío García Escudero el otro día en TVE: "respecto al caso Gürtel aquel que haya sido imputado por la justicia tendrá una suspensión de militancia inmediata", así se había actuado en fechas previas con los militantes madrileños imputados. El problema que se le presentó al portavoz popular en la cámara alta por piar a destiempo fue que pocas horas después el TSJ valenciano acordó tomar declaración en calidad de imputado a don Francisco Camps y a don Ricardo Costa, Presidente de la CA valenciana y Secretario Regional popular valenciano respectivamente. De suspenderles de militancia por supuesto ni pío.
La imputación de Camps probablemente no tenga mucho futuro puesto que moralmente se considera injustamente perseguido y con eso debería bastar cuando uno es de derechas; su moral Jeckyl que le lleva a ser recibido en el vaticano por el Papa, eso sí vistiendo de regalo para la ocasión, nada tiene que ver con su moral Hyde que le lleva a negar conocer a su amigo del alma, el bigotes, por mucho que luego le graben queriéndole un huevo (alusión textual y para nada homo-irónica). Lo de Camps es simplemente mala suerte; al socialista juez Garzón le dio por intervenir conversaciones ajenas y pillar en pleno romance al bigotes y al presidente, algo que con un gobierno liberal jamás habría pasado, ¿a quién se le ocurre dejar que los jueces investiguen?. La ventaja del aforado Camps es que ahora el terreno de juego es el de su otro amigo del alma, el presidente del TSJ valenciano y ante uno de sus jueces instructores tendrá que declarar para ser de inmediato considerado inocente, esto último no lo ha dicho el juez sino Rajoy que por Registrador sabe mucho de esto, aunque no sea amigo del presidente del TSJ, vaya lío. El día señalado para la boda, digo para la declaración, Camps acudió dentro de uno de sus regalos y luciendo su sempiterna sonrisa de marketing; a su alrededor el coro habitual de profesionales de la mamada le agradecían el pan nuestro de cada día; todo muy mediterráneo.
Nada tiene que ver que el bigotes haya salido beneficiario de multitud de contratos con el gobierno valenciano; ya lo dijo Fraga, los de derechas son siempre mejores que los demás, por eso en Galicia siempre triunfaban en las oposiciones. Con una doble moral siempre se puede ir a misa por las mañanas y dedicar las tardes a firmar suculentos contratos con gobiernos autonómicos, siempre por supuesto que éstos últimos sean del PP. La doble moral permite también imponer el topónimo “A Coruña” en Santiago y luego andar piando en Coruña contra el Alcalde por no defender el uso del La La La; parece claro que para prosperar en el PP la clave es piar. También con doble moral se puede impugnar la Ley despenalizadora del aborto y más tarde acompañar a tu hija a abortar, o votar contra los divorcios como hizo Álvarez Cascos en los 80 para batir luego récords entrado el nuevo siglo, cuando no pedir cual obseso trillado la dimisión de González ante las culpas de sus subordinados para después largarse a trillar otro campo cuando los suyos son entrullados ¿o entrillados?
Definitivamente es lo que tiene la doble moral, te permite disfrutar de la vida e incluso forrarte diciendo tonterías como hacen Losantos o Vidal para después acostarte por las noches como si nada, que para eso se tiene a Rouco, para acallar la ¿conciencia?.
Nada tiene que ver que el bigotes haya salido beneficiario de multitud de contratos con el gobierno valenciano; ya lo dijo Fraga, los de derechas son siempre mejores que los demás, por eso en Galicia siempre triunfaban en las oposiciones. Con una doble moral siempre se puede ir a misa por las mañanas y dedicar las tardes a firmar suculentos contratos con gobiernos autonómicos, siempre por supuesto que éstos últimos sean del PP. La doble moral permite también imponer el topónimo “A Coruña” en Santiago y luego andar piando en Coruña contra el Alcalde por no defender el uso del La La La; parece claro que para prosperar en el PP la clave es piar. También con doble moral se puede impugnar la Ley despenalizadora del aborto y más tarde acompañar a tu hija a abortar, o votar contra los divorcios como hizo Álvarez Cascos en los 80 para batir luego récords entrado el nuevo siglo, cuando no pedir cual obseso trillado la dimisión de González ante las culpas de sus subordinados para después largarse a trillar otro campo cuando los suyos son entrullados ¿o entrillados?
Definitivamente es lo que tiene la doble moral, te permite disfrutar de la vida e incluso forrarte diciendo tonterías como hacen Losantos o Vidal para después acostarte por las noches como si nada, que para eso se tiene a Rouco, para acallar la ¿conciencia?.
R.A.S.